Exposición de la escultora Pepa Nieto

Moldear la arcilla es dar vida a la materia. Es el inicio de un camino de libertad hacia líneas de expresión que me permiten crear de alguna manera -aunque no siempre lo consiga- un arte que represente la realidad del mundo en que vivimos; ya que es el fondo más que la forma lo que me preocupa.

Este proceso seductor y excitante me inspira una actividad intensa, creándose una complicidad entre la obra y yo, hasta que, una vez acabada ésta, posee su propia autonomía.

Por otra parte, debo decir que mis esculturas se basan generalmente en formas de expresividad que se hacen patentes en el reconocimiento de mi obra. Formas que, consciente o inconscientemente, están relacionadas con las técnicas tradicionales, aunque sin lugar a dudas, en su mayoría prevalece intencionadamente, ese corte moderno y de actualidad, por el que siento verdadera pasión.

De algún modo, al igual que en mi obra poética, juega también un papel importante mi inclinación por las imágenes que emergen de mi imaginación.

¿Por qué elijo el barro? quizá porque lo siento como una materia más desnuda más pura y dialogante. Esto no quiere decir que descarte el contacto con otras materias, como pueden ser el hierro o la madera. De hecho, algunas de mis obras, como se puede ver, ya están realizadas utilizando el hierro. Y está en mis futuros proyectos seguir trabajando en este camino.

Pepa Nieto

Críticas

Estas piezas escultóricas de Pepa Nieto, que ahora podemos contemplar, aúnan fuerza y misterio, dicen y sugieren, se desarrollan y viven firmes en el espacio y en el tiempo, este tiempo que nos lleva y en el que viven, perdurablemente, las obras auténticas de arte, como las de Pepa Nieto.

JOSÉ MONTERO PADILLA
Catedrático y Escritor

Pepa Nieto se tiene bien aprendido que su obra, escultórica y poética, se incardina en los códigos más legítimos del arte, aquellos que fortalecen y orientan al verdadero artista. Porque en el arte, como en el amor -lo dijo Proust-, el instinto basta y la razón hasta puede resultar inoportuna.

JOSÉ LÓPEZ MARTÍNEZ
De la Real Academia de Bellas Artes
y Ciencias Históricas de Toledo

La arcilla, maleable, e incluso sensual por dócil, sale de las manos de Pepa Nieto, erguida, o derramada, o arrebujada en sí misma, o lo que es igual, desafiante, entregada o tiernísima.

Y si se analizan bien las formas que Pepa Nieto alumbra, se la verá reflejada en ellas al son de su ánimo cambiante, de sus sacudidas vitales.

CARLOS MURCIANO
De la Asociación Internacional
de Críticos de Arte

Contemplando sus esculturas o leyendo sus poemas no sabemos si esculpe versos o escribe esculturas. En las dos expresiones artísticas, Pepa Nieto se mueve en el terreno del surrealismo y el simbolismo, si bien este último se hace más patente en su escultura preferentemente abstracta.

MIGUEL ORTEGA ISLA
Escritor

ALICIA MARTÍN RUIZ
EL PUNTO DE LAS ARTES de 27 de enero 2005

Pepa Nieto, poesía del barro

El juego intelectual y poético que desarrolla Pepa Nieto en sus obras comienza cuando selecciona una forma, la moldea, la busca o nace desde lo más casual, para después unirle una historia, que sólo ella conoce.

Formas con historia pero que serían válidas sin ella, técnica tradicional unida a modernidad

Su relación con la creación artística, la transformación de lo que es sólo material

en algo que tiene alma. Quizá ella es capaz de expresar lo que siente al realizar una obra de arte porque su otra manera de expresión está en la poesía, su relación con las palabras es casi tan íntima como la que tiene con la arcilla, el barro u otros materiales que invitan a formar parte de sus obras como el hierro o la madera.

Sin lugar a dudas también han sido condicionantes para Pepa Nieto las arenas de las costas gallegas con las que jugó de niña, los contornos de los paisajes, formados a través de siglos de oleaje y suaves lluvias y vientos. Sus formas nos llevan a la naturaleza, nos conducen a través de ella, busca la inspiración en detalles nimios, aparentemente sin importancia.